La indicación más segura de que el parto ha comenzado es la presencia de contracciones del útero, repetidas y regulares.
El parto se inicia, por lo general, con una serie de síntomas, siendo el primero la expulsión de mucosidad sanguinolenta por la vagina. Se trata del llamado tapón mucoso o “de cierre” del cuello de la matriz.
Otros síntomas son inquietud general, palpitaciones, dolores, que se desplazan hacia la parte inferior de la espalda, abdomen tenso, duro y posterior aumento de secreción mucosa por la vagina.
Los especialistas explican que aunque se inicien las contracciones no puede hablarse de traba: de parto mientras la embarazada no tenga, por lo menos, tres centímetros de dilatación.
Las contracciones, al principio, son cada diez minutos, prolongándose la repetición de estos síntomas durante más de media hora.
¿Qué importancia tiene la bolsa de agua?
Si la embarazada, aun sin presentar dolor, nota que fluye gran cantidad de líquido por la vagina, es porque se ha roto la bolsa de agua. En este caso se debe acudir inmediatamente a la maternidad, porque es un aviso de que el parto va a comenzar en el plazo de algunas horas.
Algunas embarazadas demoran días o hasta semanas en dar a luz. En tal caso deberán permanecer internadas hasta el momento del parto.
Períodos del parto
Un parto normal transcurre en tres etapas o fases:
- Fase de dilatación
- Fase de expulsión
- Fase de alumbramiento