¿Dolor de espalda al dormir? El dolor de espalda se ha convertido en una de las dolencias más comunes entre la población española. Según la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (SEMERGEN), un 80% de las personas lo han sufrido, lo sufren o lo sufrirán en algún momento de su vida. Aunque en el 90% de los casos de dolor de espalda tiene un buen diagnóstico, es decir, es producido por sobrecargas, contracturas o déficit muscular, entre otros, si no se pone remedio a tiempo, este tipo de molestias pueden agravarse y privar del sueño a quienes las padecen.
¿Notas que al meterte en la cama tu dolor aumenta? ¿No consigues encontrar esa posición que te ayuda a relajarte para dormir? ¿Cuántas veces te despiertas por la noche a causa del dolor de espalda?
Durante la noche hay menos estímulos externos que nos puedan distraer de los dolores, por lo que tenemos más tiempo para pensar en ellos. Además, cuanto menos se duerme, más cansado se está, lo que incrementa la sensación de irritabilidad y de dolor al mismo tiempo.
¿Qué causa el dolor nocturno?
Las causas del dolor de espalda nocturno no siempre están claras. ¿Cuál es el origen?
- Problemas derivados de un uso inadecuado de los elementos de descanso
Dormir sobre un colchón desgastado o deformado por el uso, utilizar una almohada demasiado plana o muy elevada, adquirir una mala postura durante la noche, como dormir boca abajo…
- Problemas de causa emocional
Los problemas emocionales (estrés, miedo, ansiedad…) pueden provocar que nuestros músculos se vuelvan rígidos. Esa rigidez puede mantenerse durante toda la noche y hacer que uno se despierte con dolor.
- Problemas de causa mecánica
Nos referimos a todas esas lesiones, enfermedades o afecciones (artritis reumatoide, espondilitis anquilosante, escoliosis…) que originan dolor y rigidez en la espalda.
Soluciones y remedios para dormir
Cambiar de postura en la cama
Ciertas posiciones para dormir pueden ejercer presión adicional en el cuello, las caderas, la parte lumbar… Cambiar la postura que adquirimos al dormir nos ayudará a aliviar la presión a la que se ve sometida la espalda.
Otra opción puede ser utilizar una almohada para garantizar una correcta alineación de la columna vertebral mientras estamos bajo las sábanas. Por ejemplo, meter una almohada debajo de las rodillas si solemos dormir boca arriba o colocarla entre las rodillas, si nos hemos acostumbrado a dormir de lado.
Estiramientos en la cama
Una forma de combatir el dolor de espalda es hacer de los estiramientos un hábito. Lo bueno es que podemos hacerlos sin tener que salir de la cama:
- Lleva tus brazos sobre la cabeza, juntando los dedos. Después, mueve las palmas hacia la pared detrás de ti y empuja las palmas de tus manos. Al mismo tiempo, lleva los dedos de los pies lejos, manteniendo las rodillas rectas.
- Desde una posición supina, dobla las rodillas y acércalas al pecho. Abrázalas. Relaja tu cabeza en la almohada y mantén ese abrazo durante varias respiraciones profundas.
- Libera los brazos y permite que caigan hacia fuera, formando una T. Con las piernas todavía dobladas y juntas, déjalas caer hacia la derecha y luego hacia la izquierda. Los hombros no se pueden despegar del colchón. Gira el cuello hacia el lado contrario en el que se encuentran las piernas.
Hacer ejercicio
Hacer ejercicio durante el día nos puede ayudar a conciliar mejor el sueño de noche. No solo estaremos más cansados que si solo realizamos actividades sedentarias, sino que se ha demostrado que disminuye los niveles de estrés y eleva los de serotonina, neurotransmisor relacionado con el bienestar que estimula la producción de endorfinas.
Uso de ActiPatch®
Para un alivio inmediato del dolor de espalda son muchos los usuarios que han optado por el uso de ActiPatch® en su vida diaria. Este microdispositivo terapéutico, de uso personal, funciona mediante campos electromagnéticos que actúan sobre el origen del dolor, aliviando las molestias en la espalda, la rigidez y la limitación de movimiento. Además, resulta totalmente inocuo para la salud, ya que no contiene fármacos.
Una de las ventajas de este dispositivo es su diseño, discreto y ergonómico, por lo que pasa totalmente desapercibido y nos permite llevarlo puesto las 24 horas del día, también durante la noche.
Tan solo debemos aplicarlo sobre la piel de la zona lesionada utilizando el sistema de fijación adecuado (cintas adhesivas, faja o rodillera) para empezar a notar sus resultados.
¡Pruébalo y nota la diferencia!