Es más grave de lo que parece, tener mal aliento quizás no represente un problema grave de salud (aunque excepcionalmente puede ser así), pero afecta en mucho a nivel social a la persona. Lo peor de tener mal aliento es que normalmente a la mayoría de las personas les dará pena decirte algo, así tendrás doble problema, el mal aliento y casi una imposibilidad de enterarte.
Claro que con la pareja, hermanos o padres, incluso un verdadero amigo, esto se sabe. Para los que sufren o han sufrido de mal aliento les dejamos las mejores formas naturales de combatirlo. Varios de estos remedios naturales también son útiles para mejorar la tos y reducen la flema, por lo que son muy importantes si se consumen con regularidad.
- Limón: Como conocido antibacterial, el limón evita que las bacterias se creen y/o multipliquen en la lengua y en la cavidad bucal, combatiendo de manera muy eficiente el mal aliento.
- Té: Una taza de té también ayuda a combatir el mal aliento, sus propiedades antioxidantes le hacen un remedio bastante efectivo y fácil de conseguir y preparar. El té de miel es además muy importante para reducir la flema y tos como se puede leer en tenmuchasaludblog.
- Clavos de olor: Uno de los métodos más sencillos y al alcance de todos. Además, cualquiera puede tener unos clavos de olor en el bolsillo y masticarlos de cuando en cuando, de este modo, se lucha activamente contra el mal olor.
- Bicarbonato de sodio: Al igual que el limón, el bicarbonato de sodio (conocido como soda), es un poderoso antibacterial y lucha contra las bacterias en la cavidad bucal, evitando de este modo la fuente del mal aliento, cuando la razón no viene de un problema superior. (ver más beneficios del bicarbonato de sodio)
- Canela: Aparte de luchar contra las bacterias, tiene un poderoso olor que “cubre” cualquier rastro de mal aliento. Solo debemos hervir una cucharada de canela en polvo en un vaso de agua, podemos agregarle hojitas de laurel o menta y usar luego como enjuague bucal.
- Perejil: Aún más sencillo que los demás, solo debemos masticar unas hojas de perejil, ideal para casos de emergencia, donde tengamos que presentar un proyecto o una cita pendiente.