Depresión en el embarazo es un trastorno psicológico que afecta a las mujeres durante el embarazo y que se caracteriza por cambios de humor, ansiedad, tristeza y falta de interés en el embarazo.
Las causas de la depresión en el embarazo pueden ser los cambios hormonales que ocurren durante el embarazo, y la vida estresante, embarazos complicados, violencia doméstica, problemas de fertilidad o algún anterior episodio de aborto.
Depresión en el embarazo afecta al bebé, debido a que las madres deprimidas tienen más cambios hormonales, menos atención a la dieta y la salud, lo que daña al feto y puede provocar un parto prematuro o aborto involuntario.
Depresión en el embarazo es curable y su tratamiento debe ser indicado por el psiquiatra después de la evaluación de la mujer y las condiciones de su embarazo.
Los síntomas de la depresión en el embarazo
Los síntomas de la depresión en el embarazo pueden ser:
- Tristeza.
- Ansiedad.
- Ataques de llanto.
- Pérdida de interés en las actividades cotidianas.
- Irritabilidad.
- Los trastornos del sueño como el insomnio o somnolencia excesiva.
- El exceso o la falta de apetito.
- Los sentimientos de culpa.
- Pensamientos de muerte o suicidio.
Los cambios de humor durante el embarazo son normales, como resultado de cambios en los niveles hormonales que sufren las mujeres en esta etapa. Pero si estos cambios se mantienen durante varias semanas o meses, la mujer debe consultar a su ginecólogo para evaluar la situación.
A menudo, la depresión en el embarazo conduce a la ausencia del trabajo debido a que la mujer no puede hacer las actividades diarias y se cansa fácilmente.
El tratamiento de la depresión en el embarazo
El tratamiento adecuado para la depresión en el embarazo es fundamental para la buena salud de la madre y su bebe. En los casos leves se recomienda la psicoterapia y apoyo psicosocial, y en los casos moderados a severos es necesario el tratamiento farmacológico.
Algunas de las posibles consecuencias de la medicación pueden ser aborto, muerte fetal, retraso del crecimiento fetal, parto prematuro, intoxicación o abstinencia al consumo de drogas por la malformación del recién nacido y del feto.
Se debe tener cuidado por el psiquiatra para prescribir medicamentos: como elegir los fármacos, la dosis efectiva más baja, y si es posible cualquier medicamento ya utilizado con éxito anteriormente por la mujer embarazada. De los antidepresivos, los más utilizados son los tricíclicos y los ISRS (inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina). Ansiolíticos de benzodiazepina no son parte del tratamiento de la depresión gestacional, pero se pueden utilizar al comienzo y en dosis bajas. El reconocimiento y el manejo adecuado de la depresión en contexto obstétrica permitirán un embarazo más pacífico y saludable para la madre y su bebé.
Mujeres, nuestra intención con este artículo es para alertar a hacer todo lo posible para tener un embarazo saludable, esto incluye una dieta equilibrada, ejercicio regular y, por supuesto, las actividades que le proporcionan placer y tranquilidad. El resultado será visto no sólo en que usted tenga un embarazo aún más hermoso y radiante, pero sobre todo que su bebé nacerá sano y lejos de las perturbaciones causadas por los efectos negativos de la depresión durante el embarazo.
