Es imprescindible que la mujer embarazada siga un control médico durante el período de gestación.
Se trata de un examen médico completo, a fines del tercer mes del embarazo, con el fin de ver todos los riesgos que pudieran amenazar la salud de la madre o del niño.
El diagnóstico de orina para determinar la cantidad de azúcar y albúmina; la determinación del grupo sanguíneo RH(+) o RH(–); programar un examen de sangre para saber si existe anemia; examen pulmonar; diagnóstico preventivo de sífilis; etc. Todos estos exámenes establecen si hay algún trastorno o riesgo en el futuro de su hijo.