Una nueva técnica en mujeres puede detectar el cáncer de mama mucho antes de que el tumor pueda detectarse en una mamografía o a la palpación en una exploración de la mama. Médicos en Texas han empezado a emplear una nueva técnica en mujeres para detectar el cáncer de mama mucho antes de que el tumor pueda detectarse en una mamografía o a la palpación en una exploración de la mama.
Pueden pasar de 8 a 10 años antes de que las células cancerosas crezcan para formar una masa lo suficientemente grande para ser detectada, según el doctor David Euhus, que realiza la técnica en el Centro Médico de la Universidad de Texas, en Dallas. La técnica, en la que se limpian los conductos galactóforos para que se puedan examinar las células de revestimiento y observar si son precancerosas, se denomina lavado de conductos. Durante la intervención, un catéter diminuto se introduce en el conducto galactóforo mediante una incisión en el pezón y se usa una solución salina para sacar las células del conducto.
Como la técnica no puede examinar todos los conductos -existen entre 20 y 30- la prueba se dirige sólo a aquellos que están produciendo líquido. Hasta ahora, la técnica se ha usado en cerca de 30 mujeres en la clínica de Texas, que se consideraba tenían un alto riesgo de desarrollar cáncer de mama dada la alta incidencia de dicha enfermedad en su historia familiar.
En la mayoría de los casos, se encontraron células que parecían normales, pero en dos mujeres se encontraron células precancerosas, informó Euhus.»Estas mujeres tienen la opción de tomar el medicamento tamoxifeno, puesto que se ha demostrado que disminuye las posibilidades de una mujer de desarrollar cáncer de mama», dijo Euhus.
En la actualidad, la intervención se realiza en numerosas clínicas de ocho estados diferentes, según Pro-Duct Health, la compañía médica con sede en Menlo Park, California, que ha desarrollado la técnica. Varios centros de cáncer de mama de todo el país ofrecen ya el lavado de conductos. El lavado de conductos estará disponible en muchos más centros a medida que los médicos reciban el entrenamiento apropiado, notificó la compañía. Sin embargo, el lavado de conductos no es un sustituto de las mamografías, concluyó Euhus.
