El término “hacer pesas” en realidad puede tener una gran cantidad de significados, tanto que habitualmente se usa para comentar prácticas deportivas en las que ni siquiera hay pesas presentes, sino algún tipo de equipo para gimnasio que está diseñado para ejercitar los músculos al igual que las pesas pero buscando la mayor efectividad en el menor tiempo posible, como los bancos de abdominales, los aparatos de remo o las ya famosas plataformas vibratorias.
Todos estos aparatos, usados convenientemente, producen en los músculos efectos similares a los de los ejercicios con pesas y mancuernas, si bien lo que se busca es lograrlo con un esfuerzo menor y más efectivo al tratar de evitar que el cuerpo se vea sometido a malas posturas que podrían dar como resultado lesiones de diversa gravedad.
En los gimnasios vemos que cada vez hay menos pesas y más aparatos de estos, por lo que la pregunta “¿Haces pesas?” debería comenzar a desaparecer y se sustituida por otras del tipo “¿Vas al gimnasio?” o “¿Haces ejercicio?”.
Esto, por supuesto, no es más que un tema sintáctico, no obstante es muy probable que alguna vez nos encontremos con alguien que nos diga que no hace pesas, y sin embargo nos preguntemos: “¿Y cómo puede tener esos músculos entonces?”.