Este síndrome ha tomado relevancia a partir del año 1940. Anteriormente no se relacionaba ninguno de los síntomas al hecho de dejar de fumar.
En estudios realizados en la década de 1960 y 1970, se expone la existencia de síntomas de abstinencia al tabaco, por ende a la nicotina.
El 50% de las personas que dejan de fumar de forma abrupta sufren de la aparición del síndrome de abstinencia a la nicotina, causando recaídas dentro del proceso del abandono del cigarrillo.
El síndrome de abstinencia tiene de forma evidenciada una caída de los niveles de dopamina por no estimularse los receptores por la supresión de la nicotina.
Estos síntomas aparecen rápidamente, entre 10 a 12 horas de haber dejado de fumar y puede prolongarse desde 2 hasta 4 meses.
¿Cómo se diagnostica un síndrome de abstinencia a la nicotina?
- Comprobación de un previo consumo del tabaco.
- Una interrupción de forma brusca del hábito de fumar que se puede presentar los siguientes síntomas: depresión, insomnio, irritabilidad, falta de concentración y tranquilidad, disminución en la frecuencia cardiaca, aumento del apetito y por ende de peso.
- Problemas sociales, familiares y laborales.
