Has llegado a las 20 semanas de embarazo, después de esos molestos síntomas que experimentaste en los primeros días de gestación, tu cuerpo empieza un periodo más cómodo, en el cual vivirás esta experiencia de una forma más confortable y disfrutaras de cada momento sin enfocarte solamente en los malestares, sobre todo porque tu panza aún no ha crecido lo suficiente y aun no tienes que lidiar con el exceso de peso que soporta tu espalda, así como de las noches incomodas en las que no podrás conciliar el sueño. Quizás pasar por el proceso de tener un bebé no es lo que esperabas y te está costando acostumbrarte a la nueva forma de vida, que, sin duda apenas comienza. Sin embargo ten por seguro que al finalizar tu embarazo, todos estos inconvenientes pasaran a segundo término, pues tendrás la dicha de convertirte en mamá y sentir una magnifica satisfacción por haber padecido, disfrutado y anhelado cada semana de tu embarazo.
El bebé en la semana 20 de embarazo
Tener más información respecto al crecimiento del bebé puede ser una motivación para engrandecer esa ilusión de tenerlo contigo. Por el momento todos los nutrientes que el feto necesita los recibe a través de la placenta, sin embargo bien sabemos que al nacer requerirá de su aparato digestivo para poder alimentarse, por lo cual a su corta edad de gestación empieza a realizar un mecanismo similar al de alimentarse, ya que inicia a tragar liquido amniótico y absorber pequeñas porciones azúcar, así poco a poco se irá preparando para lo que será su vida real. Por otro lado tu útero va aumentando de tamaño conforme es necesario, pero como tu bebé aun es muy pequeño, cuenta con espacio suficiente para moverse y desplazarse a su antojo, dándose la oportunidad de experimentar un sin fin de posiciones, las cuales también funcionan como un estimulante en su desarrollo cerebral.
Como un dato interesante debes saber que él bebé se utiliza tus descansos para estar despierto y realizar sus rutinas de ejercitación, por lo contrario cuando te encuentras en movimiento aprovecha para arrullarse y dormir sus siestas. Sin duda debes prepararte, porque conforme vaya creciendo su espacio será más reducido, lo que ocasionara que percibas cada uno de sus desplazamientos sobre todo cuando te dispongas a dormir e incluso te despertarás con sus pataditas. De tal manera que aprovecha para descansar todo lo posible, ten cuidado con hacer mucho esfuerzo físico y poner a trabajar a tu cuerpo más de lo que en estas condiciones puede.
Ser mamá es lo mejor que puede pasar en la vida
Un embarazo es una alegría, con la cual te sientes realizada como mujer, pero lo cierto es que implica un gran sacrificio para ti y los que te rodean, lo importante es valorar la oportunidad que tienes de ser mamá, viviendo cada cambio de la manera más positiva que puedas, si sientes que este proceso es más de lo que esperabas o te habían contado, piensa que no eres la primera y que dentro de algunos meses ni siquiera te importará todo lo que tuviste que afrontar para formar un hogar.