En una pareja, el hecho de no poder tener hijos no siempre quiere decir que una de las partes de la pareja tenga problemas de infertilidad que le impidan tener un hijo. Trastornos varios pueden hacer que la concepción no se produzca por el método tradicional.
Una vez que en la clínica Ginefiv han descartado problemas que impidan la concepción, entre los tratamientos más sencillos y más recomendados, se encuentra la inseminación artificial.
La inseminación artificial es un proceso mediante el cual se introduce de forma artificial, semen en la cavidad uterina. Para que el tratamiento de inseminación artificial tenga efecto es importante conocer a la paciente, teniendo en cuenta, sobre todo los días de ovulación, para garantizar un mejor resultado.
La técnica de la inseminación artificial en la Ginefiv clínica de reproducción asistida consta de tres fases:
- Para favorecer la concepción, antes de la inseminación, se produce a la estimulación ovárica, mediante hormonas que ayudan a la maduración de los ovocitos.
- La selección y capacitación de los espermatozoides también es importante. Al tiempo que se produce la selección ovárica, que analizan muestras de semen y, si fuera necesario se mejoran sus características.
- La tercera parte es la creación de la condiciones necesarias para la concepción, o lo que es lo mismo, la implantación artificial del semen en la zona uterina.
Aunque si las condiciones son las adecuadas se puede usar semen de la pareja masculina, clínica Givefiv cuenta con un banco de semen de donantes anónimos que han pasado un riguroso control de selección y adecuación. La inseminación artificial es una técnica indolora y muy recomendable para parejas heterosexuales que tienen dificultades para tener hijos, así como para parejas de mujeres homosexuales, o para mujeres soltera que deseen ser madres.
Si la inseminación tiene éxito, el embarazo se producirá, de hecho, en un 20% de los casos, la inseminación artificial tiene como resultado un embarazo múltiple.